Too late
Mrs. May había emprendido hace ya meses una huida personal hacia adelante donde parecía que su único interés era enrocarse en su posición, ignorando las decisiones del Parlamento británico. Mrs. May necesitaba obtener algún acuerdo de su ciudadanía que permitiera difuminar su desafortunada trayectoria política. No solamente no ha podido conseguirlo sino que deja a su país incluso más dividido que cuando tomó posesión. Llegado a este punto lo sensato sería dar la palabra a los ciudadanos británicos en un definitivo segundo referéndum pero votando las condiciones exactas del acuerdo de salida.
Luis Martínez-Almoyna Rifà
Director de Fiadex