La intención de los bancos no es tener inmuebles en propiedad. Al poseer estos activos ya sufren las provisiones impuestas por el Banco de España así como el pago de impuestos asociados a las viviendas. Las sanciones parece que persiguen un simple espíritu recaudador sin que el destino de dichos fondos vaya a tener un uso finalista sino más bien a la bolsa común del gasto corriente como sucede con la ecotasa. ¿Éstas son las mejores alternativas que ofrecen nuestros dirigentes y por qué no empezar con optimizar los inmuebles en manos de las Administraciones Públicas?
Luis Martínez-Almoyna Rifà
Director de Fiadex