Para fortalecer una recuperación económica se necesita incentivar la demanda interna y el consumo. Si bien una bajada de salarios pudiera tener ciertos beneficios, debilitaría la incipiente mejora de la situación económica. Son necesarios estímulos que fomenten el crecimiento y la generación de empleo animando al consumo interno. Existen otras alternativas que ayudarían a mejorar la competitividad y el desempleo tales como una bajada de impuestos y reducciones en las cotizaciones sociales. Es necesario enfocar la mira de las decisiones hacia medidas de crecimiento.
Luis Martínez-Almoyna Rifà
Director de Fiadex