Las Islas Baleares son un destino con una elevada seguridad y que funcionan como destino refugio al producirse conflictos internacionales. Se tiene que ser consciente que existe un número de turistas prestados que desaparecerán al recuperarse la estabilidad. Se presenta una oportunidad única que no podemos ni debemos desaprovechar: ¿a cuantas regiones de España les encantaría tenerla?. El objetivo debería ser la fidelización de la mayor parte de ellos y disminuir esa dependencia a factores externos. Todos con nuestra actitud hacia el visitante deberíamos intentarlo.
Luis Martínez-Almoyna Rifà
Director de Fiadex